El Equipo de Investigación Tecnológica (EDITE) y Equipo@, de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Zaragoza, han llevado a cabo la denominada operación ‘Interprise’, que ha finalizado con la desarticulación de una organización criminal dedicada a estafar a empresas mediante el modus operandi de ‘Man In The Middle’, un ciberataque en el cual un hacker interviene en las comunicaciones entre dos personas.
La operación ‘Interprise’ se inició a finales del año 2020 cuando los responsables de una empresa dedicada a servicios de balizamiento y ubicada en la provincia de Zaragoza, presentaron una denuncia ante la Guardia Civil en la que comunicaban que habían sido víctimas de una estafa.
Los empresarios se dieron cuenta del fraude porque poco después de efectuar el pago de una factura a un proveedor habitual, por una cantidad superior a los 100.000 euros, recibieron una nueva comunicación en la que se les solicitaba el pago de otra factura, por una cantidad de 43.000 euros. Por este motivo, los denunciantes contactaron con su proveedor y descubrieron que éste no había recibido el ingreso de la primera factura.
Las investigaciones llevadas a cabo por los especialistas determinaron que la empresa denunciante había sufrido una interceptación en sus comunicaciones a través de la cual los ciberdelincuentes habían modificado el número de cuenta de la factura pendiente de pago obteniendo, de esta manera, el ingreso de dos transferencias bancarias que ascenderían a más de 100.000 euros.
Además, la Guardia Civil llevó a cabo una investigación en la que se estudiaron distintos movimientos bancarios, empresas ‘fantasmas’ o conexiones de IP, así como reintegros realizados en cajeros automáticos y entidades bancarias. Fruto de este análisis se determinó que los presuntos autores de la estafa formaban un grupo criminal asentado en diferentes puntos de España.
Los sospechosos actuaban de manera coordinada y con distintos cometidos para obtener dinero que después sería distribuido entre los miembros de la organización, a través de transferencias a terceras cuentas bancarias de España, Portugal y Eslovenia.
Una vez la Guardia Civil examinó estas transferencias, se obtuvo la identidad de varias personas como titulares de las cuentas bancarias, además de otros que hacían uso de ellas para extraer el dinero y proceder a su blanqueo.
Teniendo indicios de que los sospechosos residían en las provincias de Murcia, Albacete y Valencia, los investigadores se trasladaron a estos lugares en los que lograron localizarles. Se procedió a la detención de tres personas y a la investigación de otras cuatro, como presuntos autores de delitos de estafa, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal.
Los implicados, cinco varones y dos mujeres, de nacionalidad española, cubana y colombiana, quedaron a disposición judicial tras las detenciones. Uno de ellos tenía antecedentes por diferentes hechos delictivos.