Los hechos tuvieron lugar en la Calle Doña Sancha de la capital oscense. GMaps

La Policía Nacional ha sancionado a diez personas que celebraban una fiesta privada en un domicilio en la calle Doña Sancha de Huesca. En el interior de la vivienda se encontraban unas 20 personas no convivientes, algo que va en contra de las restricciones sanitarias que pretenden evitar la propagación de la pandemia. Los infractores se enfrentan a multas que pueden llegar hasta los 60.000 euros.

Los hechos tuvieron lugar el sábado, 24 de octubre, sobre las 03.30 horas, cuando varios vecinos de la zona alertaron a la policía de la existencia de una fiesta en un domicilio. Al personarse las dotaciones policiales en el lugar, los agentes comprobaron que desde la misma calle se escuchaba música alta, voces y gritos, por lo que procedieron a llamar a la vivienda afectada, sin que obtuvieran respuesta, cesando inmediatamente los ruidos.

Ante esta situación y con el fin de identificar y sancionar a los participantes de la fiesta, los agentes permanecieron en las inmediaciones del domicilio a la espera de que saliesen a la vía pública, momento en el que fueron propuestos para sanción. Además, los policías continúan realizando gestiones para identificar al resto de participantes de la fiesta.

ESFUERZO

Ante estos hechos, la subdelegada de Gobierno en Huesca, Silvia Salazar, ha pedido a los ciudadanos mayor esfuerzo para hacer frente al virus y ha recordado que «llega el invierno y el virus está en una segunda ola descontrolada». «Esta situación nos está afectando sanitariamente y no sólo porque el COVID está saturando los hospitales y las UCI, sino porque no hay que olvidar que hay otras patologías y también nos está afectando económicamente», ha relatado.

EP