Calle Predicadores, cerca del Mercado Central de Zaragoza. GM

La reforma integral de la calle Predicadores reducirá la calzada de 5 a 3 metros, que será de cota única con aceras más anchas, priorizará el uso peatonal, además del disfrute vecinal al contar con bancos y se plantarán unos 20 nuevos árboles.

También se sustituirá la iluminación por tecnologías más eficientes como las luminarias led, se soterrará el cableado aéreo y, si procede, se mejorará el saneamiento y abastecimiento de agua.

La consejera municipal de Infraestructuras del Ayuntamiento, Patricia Cavero, y el jefe del Servicio del Viario Público, Jesús Giménez, han presentado el proyecto base de reforma, que tiene un presupuesto de 700.000 euros y un plazo de ejecución de unos 5 meses con la previsión de iniciarlo en unos tres meses y terminarlo este año.

Patricia Cavero ha explicado que esta reforma es una «larga reivindicación vecinal que va a hacer realidad por el Gobierno PP-Ciudadanos» y ha destacado que muchos aspectos reclamados por los vecinos coinciden con los criterios del equipo de gobierno y están recogidos en el proyecto base.

Uno de esos aspectos coincidentes es la prioridad peatonal y su accesiblidad que conllevará menos espacio para los vehículos y se plantea convertir a la calle en un eje vertebrador principal de movilidad peatonal.

Será una calle más amable, con espacios verdes donde se reducirá la circulación y cuyo trazado sinuoso ayudará a reducir la velocidad que establecerá en 20 kilómetros por hora, y la proximidad al paseo Echegaray y Caballero podrá asumir el tránsito de los vehículos que se saquen de la calle Predicadores para que sea una «zona de encuentro» ha expuesto Patricia Cavero.

Otra petición vecinal que quedará atendida es la supresión del adoquinado que produce inestabilidad y ruido al paso de los vehículos, así como la reducción de la calzada de 5 a 3 metros, junto a la mejora del alumbrado y la supresión de barreras arquitectónicas. Esta reducción de la calza también aminorará la zona de estacionamiento en un 40 por ciento de las plazas para carga y descarga.

EP