La Policía Nacional ha detenido entre la noche de este sábado y la mañana de este domingo a tres personas por sendas lesiones con arma blanca. En todos los casos, las víctimas y los autores se conocían previamente.
Por una parte, agentes de Policía Nacional han detenido a U.C.G.C., de 29 años, como presunto autor de un delito de lesiones y otro de amenazas, tras agredir a su pareja con un cuchillo, en el distrito zaragozano del Casco Histórico.
Los hechos tuvieron lugar el pasado sábado, 8 de mayo, sobre las 22.40 horas, cuando se recibió una llamada en la que se ponía en conocimiento de la Policía que una persona había resultado herida por arma blanca en el transcurso de una pelea, en el interior de un domicilio, en la calle Don Jaime.
La Jefatura Superior de Policía de Aragón ha señalado que cuando los agentes se personaron en el piso, encontraron a una mujer con un corte en la mano. Tras ser asistida, manifestó que una discusión entre su pareja y otro compañero de piso había terminado con ella agredida.
El autor de las lesiones, que había sido recriminado por las otras dos personas por sustraer comida de la nevera, esgrimió dos cuchillos de cocina y amenazó a su compañero de piso, momento en el cual la novia se interpuso entre ellos para intentar mediar, resultando lesionada.
Una hora más tarde, sobre las 23.40 horas, varios indicativos de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana fueron alertados en el barrio de Valdefierro de Zaragoza, donde también se había producido un herido por arma blanca.
En esta ocasión, M.A.R.G., de 23 años, le había realizado un corte en la mano a su víctima, a quien le exigía el abono de una deuda, por lo que, además de las lesiones, se le imputa un delito de realización arbitraria de propio derecho.
Por otra parte, el domingo, 9 de mayo, sobre las 07.00 horas, la Policía fue alertada de una pelea en vía pública, en el barrio de Torrero, concretamente, en la avenida América, donde, según la persona que dio el aviso, un joven sangraba de manera abundante por la cabeza.
Cuando los agentes llegaron al lugar, hallaron a cuatro jóvenes discutiendo en la calle y se percataron que uno de ellos sangraba por la cabeza. Según los implicados en la pelea, los hechos se habían producido en el interior de la vivienda de un amigo y la agresión se había producido con un vaso de cristal.